16 de março de 2013

Me quieres pero yo a ti, no.- Capitulo 3



Capitulo 3

Misha salió del hospital dos semanas después. Caminaba despacio apoyándose en un bastón. Jensen decidió indicarle la habitación del piso de abajo porque así se ahorraba tener que subir escaleras y que le pudiese pasar algo.
-¿Estás confortable? –Quiso saber Jensen entrando en la habitación decorada con colores pastel.
-Sí, gracias. Todo está perfecto.- contestó.
-Cualquier cosa que necesites yo estaré arriba.
-Jensen…
-Sí?
-¿Por qué te has empeñado en que viniese?- Jensen abrió la boca pero antes que dijese lo que fuese Misha continuó: No debí ponerlo así, es más bien: ¿Qué ha cambiado para que de pronto podamos ser amigos quizás?
Jensen suspiró y sin saber que decir solo le retribuyó una pregunta:
-¿Qué pasó la noche del accidente?
-Oh, una tontería- dijo con una sonrisa.
-No me parece que pueda haber sido una tontería, estuviste a punto de morir.- Se cruzó de brazos.
Misha arregló la almohada detrás de su cabeza mientras empezaba su historia:
-Yo venía algo distraído y un ciervo se cruzó en la carretera. Giré hacia un lado para no darle…- Jensen quiso llenarle la cara de bofetadas.
-¿Casi te matas por un puto ciervo? Estás como una cabra.- Bueno pero de no ser por el “puto ciervo” no lo tendría allí… Trató de sacar ese pensamiento de su cabeza. Cómo si él fuese un hombre gay y encima uno que pone escusas para tener lo que quisiese… no es que quisiese a Misha… De nuevo ese lio en su cabeza.
-Sí, es que fue demasiado rápido, mi instinto fue hacer girar el coche… ¿Jensen? – Misha se dio cuenta que el rubio le miraba pero no escuchaba ni una palabra.
-Si… - su cerebro volvió al tema- Sí, a lo mejor yo habría hecho lo mismo, no lo sé.
Se despidió de nuevo y se metió en su habitación. Durante toda la noche estuvo dándole vueltas a la cabeza sobre esos pensamientos que le habían asaltado durante la conversación y se dio cuenta que tener a Misha allí no era buena idea… Cuando le miraba sus pensamientos volvían aquella noche de la acampada cuando habían compartido el saco de dormir. Su cuerpo que encajaba tan perfectamente en el suyo, el olor de sus cabellos que rozaban su nariz, el sabor de sus labios cuando le había besado. Desde luego que había sido besado por bocas mucho más talentosas que esa, pero sin embargo quería volver a probar de esos labios.
La mañana llegó demasiado pronto para Jensen quien despertó con un gran alboroto proveniente de la cocina. Se levantó de un salto y voló por las escaleras. Cuando llegó al local Misha estaba caído en el suelo de piedra negra con varios platos rotos a su alrededor.
-¿Qué estás haciendo?- Se apresuró a ayudarle.- ¿Estás bien? ¡Te dije que me llamases!
-Estoy bien.- Jensen pasó su cabeza por debajo de su brazo- No estoy acostumbrado a estar tan dependiente de los demás…
-Haber pensado en ello antes de estrellarte.- Lo llevó como pudo hasta el sofá y se sentaron juntos.
-Esta es la segunda vez que me cuidas cuando me hago una pupa, ¿crees que puede significar algo? – le miró a los ojos.
-Creo que no debes abusar de tu suerte.- contestó Jensen apartando la mirada.- No me he olvidado de lo que hiciste la otra vez.
-¿Qué hice?- inquirió con tono inocente.
-Me besaste.- Misha sonrió satisfecho por la forma como sonaba la frase en los labios de Jensen.
-Ah eso…- se encogió de hombros.
-¡Lo dices como si no hubiese significado nada para ti!- Explotó el rubio.
-Y te pones así porque… para ti obviamente si…- Misha trató de seguirle el raciocinio.
-NO.
-Entonces, ¿Qué más da que no me acuerde?- mintió con cada diente que tenía en la boca y Jensen apretó los puños en silencio. Algo en su interior le traicionaba. Estaba realmente molesto porque Misha parecía no acordarse de ese beso que le hizo salir de la tienda de campaña escondiendo lo que dudaba ser una erección matinal.
-Olvídalo. Quedemos en que me llamas cuando necesites algo.- Se levantó- Haré algo para desayunar.
Misha notó que Jensen se quedó molesto durante el resto del día. Si le hablaba le contestaba con gruñidos que podían significar sí o no, todo dependía de cómo quisiese uno interpretarlo.
-Ayer, no llegaste a contestar a mi pregunta.- Le acusó Misha apartando la mirada de la vieja película de Rambo e hizo silencio esperando la respuesta.- ¿Jensen?- llamó obligándole a parar de fingir que no le había escuchado.
-Mi interés en tu recuperación es totalmente profesional.- Contestó con dureza.- No deseo perder mi empleo.  
-Jensen, si me dieron el alta es porque ya no estoy en peligro de vida, no voy a romperme, así que no tienes escusa.
-No tengo otra que ofrecerte.- Apartó la mirada y la volvió a fijar en la pantalla.

-Yo creo que si tienes.

-Eres un  poco presuntuoso, ¿no?- Misha sonrió con picardía y se movió al sofá donde se encontraba el rubio.

-Mira yo creo que ya que no puedes aceptar todo lo que sientes, podrías por lo menos dar el brazo a torcer y aceptar en ser amigos.- Sus dedos se movieron lentamente hasta la mano de Jensen y la tocó despacio.

-No me toques. Y no vamos a ser amigos.

-¿Por qué no? Cambiaria algo de lo que estamos haciendo ahora?- Sus ojos azules indagaron los verdes con curiosidad.

-No.

-Entonces por…- Pareció confuso.

-Porque empezaríamos a salir muchas veces juntos, a beber juntos, a contarnos cosas, a divertirnos juntos. Empezaríamos a ser íntimos y…

-Y…?- Jensen llenó los pulmones de aire por un instante y cuando soltó la respiración solo dijo:

-Vete a la cama Misha.

-No me iré a la cama, aún no se terminó la película. – Se recostó. Ambos se quedaron en silencio durante un rato mientras que en la televisión John Rambo se tiraba un montón de vísceras por los aires. – Sabes… solo acepté en quedarme porque tenía una esperanza, que al final terminases por admitir que sientes algo por mí. Era una esperanza muy diminuta de que por lo menos lo admitieses solo para nosotros, si? Pero ahora, me doy cuenta de que no va a pasar…- Le miró de reojo y Jensen parecía consternado.- Ya estoy enamorado de ti desde hace mucho tiempo y creo que seguiré enamorado de ti. No de este Jensen que me aleja cada vez que le hablo, pero de ese Jensen que sonríe y es tierno… De ese Jensen seguiré enamorado, pero tampoco me quedaré aquí mirando mientras me rechazas una vez tras otra. Así que, mañana me marcharé.

Se levantó y se marchó cojeando dejando a Jensen mirando las pequeñas doblas de su camiseta. Cuando escuchó la puerta de la habitación cerrar algo caliente le surgió en los ojos. Cerró los dientes con toda su fuerza pero fue en vano, las lágrimas salieron y resbalaron por su piel blanca.

Sacó su móvil del bolsillo, tenía que llamar a Jay, él sabría qué hacer. Seleccionó a Jared en su Iphone pero cuando iba a llamar se arrepintió. Solo él debería elegir que hacer… Jared ya había elegido casarse hacía mucho tiempo, seguir con su vida. No debería mantenerse atado, debería seguir con la suya propia también.  Se pasó la mano por el rostro y suspiró.

La habitación estaba silenciosa, apoyó su frente sobre la madera antes de golpear la puerta con suavidad.

-Misha…

-Dijiste que me acostase, eso hago.- Contestó desde la habitación. Pero Jensen le ignoró y abrió la puerta. El hombre se sentaba en su cama y jugueteaba con la almohada. El rubio se acercó y se sentó en la cama sin pedir permiso.

-Lo siento.- Detuvo las manos de Misha con la suya y las apretó entre sus dedos. – No quiero que te vayas.

-Jensen… ya hemos pasado por esto antes. Ahora dices eso pero después me ignoras y terminaría sintiéndome mal aquí. Terminaré de recuperarme en casa. Tendrás tu espacio, no hace falta que pretendas nada más.- Dijo con suavidad mientras se fijaba en una lagrima asomándose en los ojos verdes.

-Jared me ha herido mucho. No fue aposta, sé que no se ha dado cuenta. Él no tiene la culpa de que yo me haya enamorado. Fue el mejor amigo que nunca tuve… No sé si soy capaz de desconectarme de él. Todas las personas que alguna vez quise realmente, me han hecho sufrir, tienes que darme tiempo Misha.- Misha limpió el rostro de Jensen con cariño.- No quiero que te vayas, no sé ni porque quiero que me caigas mal todo el tiempo, quizás es solo que…- se mordió el labio- tenga miedo que me vuelvan a herir.

-Estas haciéndolo todo un lio en tu cabeza Jensen. Claro que quiero tener algún relacionamiento íntimo contigo pero no tenemos que ir tan rápido, solo quiero que no seas tan hostil… y no creo que Jared haya dejado de ser tu amigo.- La mano acarició el cuello del rubio.

Jensen cerró los ojos y asintió. Sus labios temblaron  y Misha supo que debía consolarlo. Abrió sus brazos y dejó que Jensen se metiese entre ellos llorando en silencio.

Se quedaron así mucho tiempo, El único sonido en la habitación era el de Jensen sorbiendo de vez en cuando o el rozar de las manos de Misha sobre su camisa verde militar.

-Lo siento…- murmuró con la voz empalagosa.

-Tranquilo. No es fácil querer a alguien que no te quiere. Mira mi caso…- Sonrió con suavidad.- Quiero a uno que está enamorado de otro…

-Dios que imbécil eres.- Jensen se levantó de su pecho, sus ojos estaban muy rojos y aguados, su rostro mojado y pringoso. Se limpió a la manga de la camisa.

-Un poco, pero siempre estaré aquí para ti.- Terminó de limpiarle los enormes ojos verdes con el dedo.

-Te ayudaré con esto…- se levantó para empezar a abrirle la cama pero un brazo sujetó el suyo con firmeza.

-Quédate, si te marchas no dormirás te conozco Jensen, volverás a ponerte a pensar en todo esto.

-¿Y si me quedo?- Preguntó mirándole a los ojos.

-Celaré tu sueño. – Dijo tan solo.




12 comentários :

  1. Precioso capítulo, Misha es encantador y Jensen... hay momentos que dan ganas de darle una bofetada, pero por fin parece que se ve un poco de luz. Espero con ansias mas capitulos.
    Besoss

    ResponderEliminar
    Respostas
    1. Jajaja pobre Jensen XD Pero si es un poco terco. Muchas gracias por leerlo!

      Eliminar
  2. Me ha encantado, es un capítulo conmovedor. Me alegra ver que Jensen empieza a asumir sus miedos, ha dado un gran paso.
    Me muero por saber como sigue ;p
    Besos

    ResponderEliminar
    Respostas
    1. Sii, es que Jensen tiene mucho miedo de que Misha no lo quiera con sinceridad.. y pobre Misha, las que tiene que aguantar. Jajaja besos

      Eliminar
  3. Halaaa, qué bonito, ha sido muy tierno. Misha es tan mono y Jensen empieza a espabilar por fin. Pero ha sido muy corto para lo que es habitual en ti, espero que sea porque pronto vas a poner la continuación. Besosss.

    ResponderEliminar
    Respostas
    1. Se me olvidó decir que me gusta mucho la imagen de ellos dos durmiendo juntos.

      Eliminar
    2. Muchas gracias Minu, si? A mime parece del mismo tamaño que los otros no se. Bueno espero que el siguiente sea mas largo *-*

      Eliminar
  4. Que bonito!, parece que Jensen se pone en marcha, aunque es gracias a Misha que es un encanto. Muchas gracias.

    ResponderEliminar
    Respostas
    1. Sii a mi tambien me gusta mucho Misha es tan lindo *-*

      Eliminar
  5. hola saito gracias por otro capi, esto ya se esta poniendo interesante! me encanta que esos dos vayan acercandose de a poco! besos

    ResponderEliminar
    Respostas
    1. Hola monica! A mi tambien me gustan los relatos en que van acercandose en lugar de conocerse en un bar y ya estar haciendo cosas al minuto siguiente XD
      Muchas gracias por leerme!

      Eliminar
  6. Fina. Hola Saito, me gusta la forma de ser de Jensen, mu gusto mucho el capitulo, mil gracias por compartir, besos

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...