Capitulo 8
Y así es, pensó
antes de llamar a Wilson, la fina línea entre el amor y el odio es tan sutil
como un termómetro en el culo.
-¿Diga?- murmuró la
voz adormilada en el otro lado de la línea.
-Soy yo, recógeme
en la comisaría, me han detenido.
-¿Qué?! House,
estás bien?
-No, tráeme
vicodin…- colgó el auricular y se frotó la pierna, el dolor le estaba matando.
Quizás fuese por el frío y sus pies descalzos, pero parecía que el dolor era
cada vez más insoportable. Apoyó la cabeza contra la pared. Tal y como conocía
a Wilson, tardaría una media hora en llegar. Dios, a veces conducía realmente
despacio.
Cerró los ojos,
privado de vicodin hacían 12 horas,
empezaba a sentirlos primeros síntomas de abstinencia.
***
-Soy el Dr. Wilson,
he venido a recoger al Dr. House.- Wilson pasó mas adentro del despacho cuando
uno de los policías le señaló un hombre entado en un escritorio repleto de
hojas desordenadas.- Buenos días…
-Soy el detective
Tritter… siéntese.- él hombre de pelo blanco y corto le indicó una silla de
madera delante de su escritorio.
-¿Por qué le han
detenido? ¿Ha hecho algo? Tiene que haber alguna equivocación…
-Me temo que no. EL
Dr. House ha sido detenido ayer sobre las 11
horas por excesso de velocidad, conducción temeraria, desacato a la
autoridad, falta de documentación, drogado…. Blablabla. Tiene más quejas por
daños morales, en realidad un montón de quejas, deudas de juego…
-¿Qué? ¿Deudas?-
Dios, eso era nuevo.
-Sí. Voy a tener
que iniciar una investigación.- El detective masticaba un chicle y hablaba despacio.
Wilson no podía aun
recuperarse del show. House parecía no solo tener problemas con las reglas
dentro del hospital. Sacudió la cabeza, como no se había dado cuenta antes de
que estuviera destruyendo su vida lentamente. ¿Todo era por el Vicodin? ¿Por la
pierna? ¿Por stacy? ¿O por todo junto?
-Comprendo…
***
-Eres un
irresponsable! Cómo demonios se te ocurre conducir a alta velocidad, sin
papeles, drogado hasta la medula!
-Dame el puto
vicodin, no puedo caminar!- House cerró los ojos y trató de aplacar el color
con un suspiro.
-¿Qué es eso de las
deudas de juego?- abrió la puerta del coche.
-Suele pasar cuando
apuestas, pierdes y no tienes dinero o tan solo no quieres pagar… ¿Me das las
pastillas?
-Te voy a llevar a
casa!...- puso el coche en marcha.- Me siento un imbecil…
-ME DUELE LA
PIERNAAA, dame Vicodin!- volvió a decir mientras que Wilson le ignoraba.
-¿Por qué haces
esto? – James miraba la carretera.
-Ya empezamos,
ahora viene el cuento de que estas frustrado y que quieres ayudarme… No
necesito ayuda, necesito el PUTO VICODIN!- Wilson buscó en su bolsillo y le dio
el frasco naranja de las pastillas. House se tomó dos de un trago y dijo:-
Llévame a casa, quiero dormir.
Cerró los ojos y no
contestó a nada más. Wilson se empeñaba en intentar ser su consciencia, decirle
más de una vez lo que podía y que no podía hacer… menuda mierda de consciencia,
pensó House, una que no puede sostener un matrimonio porque necesita acostarse
con todo lo que se mueve.
Abrió los ojos
cuando por fin el coche se detuvo.
-Te ayudaré…
-¡No necesito
ayuda!- respondió bruscamente saliendo del coche.
-Iré de todos
modos. Creo que tengo ese derecho, te saqué de la cárcel!
-Solo me recogiste,
ya me habían soltado.- House abrió la puerta y entró seguido de Wilson.
-Si no fueras un
idiota ni siquiera hubiese tenido que recogerte!- Wilson recuperó la serenidad
haciendo una pequeña mueca de dolor.- Te haré algo para comer.
-Te he dicho que no
necesito nada, déjame solo.
-Estoy arto de que
me trates así…- House giró los ojos.
-¿Hora de la
autocompasión? ¿Si estas arto que haces aquí aún?
Wilson estaba
herido una vez más. Negó con la cabeza, decepcionado, frustrado y sobretodo sintiéndose
ridículo por preocuparse tanto por alguien que obviamente le ignoraba. Era como
un puñetazo en el rostro…
No dijo nada. Vio
como su mejor amigo se iba y cerraba la puerta de golpe.
Por fin solo para
poder revolcarse en su miseria como un cerdo. Un lado de si le decía que no
debió expulsar a Wilson, el era probablemente la única persona en el mundo que
le toleraba… ya no le importaba demasiado, no necesitaba a nadie. Se quitó la
camiseta sudorosa y la dejó en el suelo.
El agua subía en la
bañera al igual que el vapor subía y llenaba el baño con una suave niebla de
olor a vainilla. Acarició la piel de sus hombros suaves al tacto pero duros por
la tensión. Desabrochó el cinturón y bajó los pantalones y los boxers de un
tirón.
Su mano paseó
distraídamente por su vientre, acarició la horrible cicatriz de su pierna e
intentó imaginar las dos piernas sanas. Cerró los ojos y suspiró, la vida era
una mierda. El dolor constante era una mierda, los efectos secundarios del
Vicodin eran una mierda… lo único que le hacia feliz de su cuerpo era su pene.
Lo tocó y lo acarició jugueteando con la piel del prepucio sobre la glande.
No estaba excitado
pero sonrió al hacerlo y siguió jugueteando con él durante un momento más. Cuando el agua estaba en el nivel que él
quería se metió dentro y se sentó casi feliz por notar el color de su pierna
remitiendo un poco.
El dolor de su
consciencia era el que volvía ahora más fuerte pero lo empujaría, apartaría el
remordimiento bien lejos, al rincón mas oscuro de su interior y se olvidaría de
el. O por lo menos eso esperaba…
***
Wilson entró en el
despacho de Cuddy después de llamar.
-Hola, ¿ha pasado
algo?- preguntó ella al verle sentarse en la silla y pasarse la mano por el
rostro.
-Sí. He ido a
recoger a House a la cárcel… ha pasado allí la noche…
-¿Qué?
-Le detuvo ese
policía… ahora han iniciado una investigación…
-¿Por qué le
detuvo?
-Exceso de
velocidad, falta de documentación, deudas de juego… uf- Wilson cerró los ojos
con fuerza reprimiendo las lágrimas- yo…
-House es un
idiota. No esperes que nada de lo que le puedas decir le haga cambiar.
-Lisa, no sabes
como me siento, no se que hacer para ayudarle… solo puedo quedarme sentado
viendo como se destruye… eso es como una bofetada en la cara.
-Tú más que nadie
sabes lo mucho que House aprecia su libertad y hacerlo todo a su manera. Es
como eso de la carpeta, se la cambias y su cerebro ya no funciona…- señaló.- Es
una mente brillante pero en el fondo no es mas que un niño.
Wilson se recostó
en la silla y la miró unos momentos, solo lo suficiente para ganar control
sobre su voz y decir:
-House y yo estamos
juntos…
Cuddy pestañeó.
-¿Juntos? ¿Cómo
pareja?
-Sí, no… bueno no
exactamente… tenemos sexo, yo creía que era más que eso, en realidad soy un
iluso y quería que fuese más que eso, pero House…
-¿La cagó?- Wilson
miró al techo.
-¡Dijo que yo era
su puta y me pidió Vicodin después de hacerlo!
-Deberías hablar
con él. Pero… no esperes que cambie de opinión… sobre la relación.
-No quiere verme.
Con todo esto me pregunto si debería pagar sus deudas de juego, cubrirle las
espaldas… eso solo va ayudar a que siga destruyendo su vida.
-Wilson, si va a la
cárcel su vida ya estará destruida.
-Lo sé.
-Tú eres un hombre
sensato, seguro que puedes hablar con ese policía… está claro que hace esto por
la historia del termómetro que house le metió en el ano. Quizás logres
explicarle que es un idiota y que no merece la pena que pierca su tiempo… no
se, intenta hacer un trato. Por muy cretino que sea, sigue siendo House…- Dijo
Cuddy intentando transmitirle alguna fuerza. Después de eso que Wilson le contó
que había pasado en su intimidad Cuddy ya no tenia tanta certeza de que fuese
apoyar a su amigo.
-Él aparta a todo
el mundo de su lado…
-Solo si tú le
dejas. Tienes que ser más terco que él.
Wilson suspiró. Por
muy irritado que estuviese era incapaz de quedarse de brazos cruzados mientras
House se jodia la vida. Cuddy tenia razón, quizás pudiese charlar con ese
policía y lograr que se olvidase del tema. Al fin y al cabo House era un buen
medico, alguien necesario en la sociedad, no era un criminal.
Era tan buen medico
que estaba seguro que su estupidez era proporcional a su sabiduría.
Hola, Saito.
ResponderEliminarEste capi me ha dejado triste.
House empeñado en alejar al único ser con el que puede contar incondicionalmente y Wilson intentando mantener el poco orgullo que le queda. Qué situación más complicada!!!
Me ha encantado, es tan fácil reconocer a House en tus palabras que me asombras.
Gracias por compartir el capi.
Besos
Hola Saito acabo de descubrir tu blog y debo decir que me encanta como va esta historia, aunque leí los capí desde el final hasta el principio je, je. Me gusta que se respete la personalidad de los personajes. Veo que tambien tienes una historia de Harry la vas a publicar completa en PDF? o hay alguna manera directa de ir al primer capi y luego en orden a los sucesivos de esa historia? Me cuesta rastrear los capis en orden a traves de los links. Besos =)
ResponderEliminarPobre Wilson, habría que darle una patada en el culo a House... en fin. Continuaré atenta a la historia =) Gracias por el trabajo que haces, encima sin ser tu idioma. Muchas gracias =)
ResponderEliminarHouse va de mal en peor y Wilson es de los que ponen la la otra mejilla hasta la saciedad.
ResponderEliminarGracias Saito por otro estupendo capi, aunque este me ha dejado muy cabreada...
Besoss
Uff, menudo cretino es House, me pone de los nervios. Pero me encanta lo bien que consigues reflejar su forma de ser en el relato, has logrado que me caiga tan mal como en la serie, jajajaja. Estoy deseando que se dé cuenta de lo mucho que necesita a Wilson y que tenga que ir arrastrándose a sus pies para pedirle perdón, es lo que se merece. Besosss.
ResponderEliminarEste comentário foi removido pelo autor.
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